Surgen nuevas interrogantes en el caso de Brandon, se filtra fotografía de su ingreso a las galeras

Tula de Allende.- La filtración de una fotografía del momento en que Brandon fue ingresado a las galeras de la policía municipal pone sobre la mesa nuevas interrogantes en relación a lo que realmente sucedió durante las ocho horas en que el joven fue encarcelado, incomunicado, con graves lesiones, bajo custodia de la Policía Municipal de Tula de Allende.

Se trata de la clásica fotografía que las corporaciones toman a los detenidos durante su ingreso, parados frente a una lona con logotipos de la corporación policiaca. De entrada, la filtración de dicha imagen echa por tierra la versión de los elementos policiacos dada en algún momento a sus familiares, sobre que «Brandon no estaba detenido» y supuestamente únicamente estaba en resguardo al ser localizado golpeado.

Peor aún, si bien en la imagen se muestra al joven con visibles golpes en el rostro, se aprecia francamente consciente, con las manos en los bolsillos y parado erguido frente a quienes lo fotografiaban. Esto difiere mucho de la forma en que los familiares describen que Brandon fue sacado de las celdas de la policía municipal: «fuera de sí, sin poder articular palabras, sin responder cuando le hablaban y con la mirada perdida». Los propios familiares concluyen que en ese momento ya presentaba un evidente daño cerebral que le dificultaba incluso mantenerse de pie, caminar y hablar.

Al comparar la imagen de Brandon a su ingreso a la celda y la que tomaron sus familiares al salir de la celda, cuando ya se encontraba hospitalizado en estado crítico horas antes de su lamentable fallecimiento, se aprecia claramente que en la primera de ellas no se observa un traumatismo craneoencefálico ni golpe en la cabeza que haya provocado el abundante sangrado que terminó por arrancarle la vida, según consta en el propio certificado de defunción.

Mientras que en la segunda imagen, cuando el joven fue sacado de la galera e internado en un hospital, ya se aprecia un golpe en la cabeza del cual sangra abundantemente, manchando su rostro y la almohada sobre la que se encuentra recostado.

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