A través de pruebas genéticas realizadas por especialistas de la División Científica de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH), se confirmó que el cadáver encontrado el pasado 14 de agosto en el río Tula, en territorio de Mixquiahuala, pertenece a una mujer reportada como desaparecida, originaria de la comunidad de Mixquiahuala.
Cómo se informó en su momento, el cuerpo, localizado entre el puente de Tunititlán y el área conocida como Baño Grande, presentaba un avanzado estado de descomposición al momento del hallazgo.
Tras varios exámenes genéticos, las autoridades lograron identificar a la víctima como C. R. M., de 42 años de edad, quien había sido vista por última vez el 31 de julio del presente año.
Aunque la causa de muerte aún no ha sido determinada, la PGJEH informó que la carpeta de investigación se integra bajo el protocolo de feminicidio. Este procedimiento garantiza que el caso sea tratado con perspectiva de género y con el rigor necesario para esclarecer las circunstancias del fallecimiento de la víctima. I
MAGEN ILUSTRATIVA.
