El pequeño, entre sollozos y miedo, relató que su vida había sido marcada por el abuso. Describió un día a día donde la libertad era un sueño
Agentes de la Policía Violeta lograron rescatar a un niño de 11 años, víctima de violencia familiar, gracias a una denuncia ciudadana que encendió una luz de esperanza en la vida del menor.
La alerta llegó de una vecina de la colonia Mineral del Oro, en el municipio de Zempoala, quien, preocupada por el bienestar del niño, se armó de valor para denunciar el constante eco de gritos de auxilio que resonaban desde un domicilio. Ante la grave sospecha, agentes de la Policía Violeta acudieron al lugar, donde fueron testigos de una escena desgarradora: la madre del menor, identificada como D.G.G., ejercía violencia flagrante, sin importar su presencia.
El pequeño, entre sollozos y miedo, relató que su vida había sido marcada por el abuso. Describió un día a día donde la libertad era un sueño lejano: su madre lo encadenaba, lo obligaba a dormir en el suelo y le negaba el derecho a asistir a la escuela. Para él, la vida había sido una pesadilla hasta ese momento.
Hoy, el niño se encuentra a salvo, bajo el resguardo de la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños, Adolescentes y la Familia, y recibió atención médica para valorar su estado de salud.
La Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH) reafirma su compromiso de proteger a los niños y niñas de toda forma de violencia. Exhorta a la ciudadanía a no quedarse en silencio y a denunciar a través de las líneas 911 y 089. Cada denuncia es un paso hacia un futuro donde ningún niño deba vivir en miedo.
