Chilcuautla.- Como una forma de contribuir a concientizar a la población sobre la gravedad de la pandemia y sobre todo de que se trata de una situación totalmente real que debemos antender todos, siguiendo las recomendaciones de las autoridades, el señor José Alberto, quien es vecino del municipio de Chilcuautla, narró a Grito Informativo su experiencia al resultar contagiado de COVID-19.
Comenzó narrando que él se encontraba en su trabajo a bordo de una plataforma petrolera en Ciudad del Carmen, Campeche, de donde todos los trabajadores fueron evacuados por la contingencia, y llevados hasta un hotel en espera de ser enviados a su lugares de origen siendo en este momento cuando comenzó a presentar un malestar.
Luego de arribar a su domicilio en Chilcuautla y tras ya presentar ardor de ojos, dolor de cabeza y cuerpo cortado acudió a la clínica del ISSSTE en Mixquiahuala, en donde le fue recetado algún medicamento y fue regresado a casa, sin embrago los síntomas continuaban cada vez más fuerte y comenzó a presentar una fuerte dificultad para respirar, al grado que asegura, le impedía poder dormir, por lo que de nueva cuenta acudió a la clínica en donde en esta ocasión ya fue tratado como un casos sospechoso de COVID-19 y bajo estrictas medidas de seguridad fue remitido a la clínica del ISSSTE de Pachuca en donde posteriormente se confirmó que era un caso positivo..
Asegura que desde ese momento de su ingreso al hospital perdió todo contacto con su familia debido al aislamiento en que se encontraba, en ese momento dijo, comenzó lo peor, los días pasaban yo me encontraba solo en el hospital rodeado de personas infectadas igual que yo, unas muy graves con tubos para poder respirar y yo sin saber nada de mi familia, preocupado por no saber si había contagiado a mi familia, si se encontraban bien o si alguien les estaba diciendo como me encontraba yo, en esos momento muchas cosas pasaron por mi cabeza incluso la fatalidad de lo que puede pasar y se siente una gran impotencia.
Durante la entrevista José Alberto reconoció que antes de haber vivido esta terrible experiencia él mismo llego a tener dudas sobre la existencia de la enfermedad, sin embrago hoy agradece enormemente al personal médico que como verdaderos héroes están atendiendo a las personas que resultan infectadas, e invito a la gente a tomar conciencia de que la enfermedad es real, es grave y puede arrebatarle la vida a cualquier persona.
Tras permanecer internado durante 13 día, José Alberto logró recuperarse y fue dado de alta y enviado a su domicilio en donde ya estable de salud, deberá permanecer aun aislado de su familia por algunos días más para evitar un posible contagio.